Que la gente espere un rendimiento desaforado y excelso de un jugador, es estar haciendo apología de una más que posible crítica, crítica que obedece más a un problema de fanatismo/fantasioso del crítico que no del propio deportista.
Cuando un jugador da una "mala imagen", entiendo que se debe atribuir más a una actitud inapropiada que altere la fluidez de la deportividad y no a una actitud de un deportista que se esfuerza por su equipo en todo momento, es positivo, respetuoso con adversarios, compañeros, jueces y público, escenificando en todo momento su compromiso y responsabilidad en sus acciones para con su equipo y sin realizar nunca un acto antideportivo ni malos gestos.
No sé lo que es mostrarse "flojo" en un encuentro, si al afirmar el crítico algo así se refiere al condicionante "fuerza", pues posiblemente ese jugador sea el componente de todo el grupo con mayor indice de fortaleza física...algo que ya ha demostrado en muchas de sus acciones.
Respecto al contenido que parece demostrar afirmando "mirar desde el banquillo", que da a entender algo así como "los malos al banquillo", diré que esa situación forma parte de la rutina de un jugador que pertenece a un deporte colectivo. Todos los jugadores están sujetos a "mirar desde el banquillo", faltaría más, forma parte de esto, hasta los mejores miraron, miran y miraran desde el banquillo.
Decir que no estamos viendo al jugador como nos gustaría verlo en competición es como desear que nos toque todos los días la lotería, esto es un juego, seguirá siendo un juego y hasta los mejores a veces no juegan siempre bien.
Por último, decir que un jugador que ha metido 2 puntos durante un partido es "todo lo que ha aportado en ataque durante un partido", es no saber que el 80% del juego de ataque se juega sin balón.
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