viernes, 21 de octubre de 2011

UNO DE LOS GRANDES



Permítanme que piense, porque ahora mismo no recuerdo el año que corría...si!!, ahora si lo recuerdo, era el año 2005; el mes?...podría ser septiembre o diciembre, porque era una concentración de la selección cadete, la generación del '90 y la del '91, la cual curiosamente visitó en esa ocasión las instalaciones de Pabellón cubierto del Pla de na tesa, el cual yo por aquellos años custodiaba. Era domingo por la tarde, de eso si me acuerdo bien y también recuerdo que como un maldito devoto de este deporte yo estaba predispuesto a alquilar mi media jornada de descanso de manera gratuita y desinteresada por cubrir los deseos de mi federación y en este caso de este grupo de chavales que se proponian preparar el próximo Campeonato de España de Selecciones Autonómicas.Recuerdo también que habia un poco de tubulto en mi club porque nuestro jugador más representativo de esa generación del '90 no estaba convocado y ello provocó algo de morbo entre los más efervescentes seguidores, con la consiguiente presencia y casi aglomeración por el número de personas que allí se dieron cita. Me mostraba algo nervioso ya que a pesar de que mi gente era más o menos educada y formal, siempre cabía la posibilidad de que alguno o algunos de ellos pudieran desde la grada hacer algún comentario de viva voz referente al malestar provocado por la no selección de dicho jugador del club. Entenderán que como responsable de la instalación y miembro de la directiva del club, mi deseo es que esa concentración de la selección cadete tuviera un transcurso agradable y que todo se desarrollara por la vía de la normalidad. Había preaparado el vestuario, los balones y demás material necesario, el agua...había recibido a los técnicos y tan sólo me quedaba pendiente sentarme en una silla y velar por las necesidades del equipo técnico durante la sesión de entrenamiento. También recuerdo ausentarme durante unos minutos, quizás para acudir al baño o para cualquier otra necesidad que no recuerdo y a la vuelta observar que casi todos los jugadores que allí se daban cita estaban trabajando a las ordenes del seleccionador...todos los jugadores menos uno, uno que estaba sentado en el suelo de la pista mirando, pero yo diría que casi ausente de lo que allí sucedía. Ahora ni entonces sé el porqué, pero me acerqué, y como un desconocido con la sensación de tenernos mucha confianza me senté a su lado, repito, como si le conociera de siempre, cuando realmente no tenía ni idea de quien era, yo puedo reconocer que tengo algún control de las generaciones masculinas de nuestro baloncesto balear, pero en ese caso no era así, no le conocía, no había oido hablar de el y no tenía ninguna referencia. Era un chico enorme, por aquel entonces estaría ya cerca de los 2 metros y con una genética física que llamaba la atención e impresionaba para un chico de tan sólo 14 años. Pensé que semejante criatura, con ese físico y esa envergadura, si no tenía ninguna referencia de él, sería porque se había iniciado hace muy poco tiempo en el deporte de la canasta o en su defecto porque acababa de aterrizar en nuestra isla. Me senté tranquilamente con él y hablamos un buen rato, no podía tomar parte en esa sesión por una inoportuna lesión en uno de sus pies, pies muy grandes por cierto. Hablamos de muchas cosas, de dónde procedía, dónde vivía, el club al que pertenecía, el estado de su lesión...y todo ello acompañado de un buen Aquarius fresquito, de esto si te recordarás muy bien!!!...verdad Stefan???...de ese Aquarius fresquito que nos tomamos mientras charlábamos un ciudadano del mundo como yo y un enorme, inteligente, fuerte y bello serbio como tú. Al terminar la sesión de entrenamiento y despedir a todo el grupo, recogí todo el material y me disponía a aprovechar el poco domingo por la tarde que me quedaba...descansar en casa, sesión de cine o quizás llamar a algún amigo para tomarnos un refresco y hablar de nuestras vidas cotidianas...pero todo ello lo haría con el pequeño regustito de tener la sensación de que en esa tarde de domingo, aquella tarde de baloncesto, había conocido a un gran ser, ya no sólo por su tamaño sino también por su humanidad.



Años después el Centro de Tecnificación Deportiva de las Islas Baleares, programa académico/deportivo que recluta jovenes talentos de varios deportes para ayudarles en su formación global, lo incorporaba, incorporaba a este chico serbio de unos 2'05 centimetros llamado Stefan Asanin, y allí fué y durante estos años dónde he podido y he tenido la oportunidad de continuar viviendo con ese maravilloso episodio que comenzó en aquella instalación del Pla de na Tesa, en aquella sesión de entrenamiento de la preselección cadete de la temporada 200/2006 y de poder confirmar con nuestras vivencias de a diario que aquel chico grande en tamaño que apareció en nuestras vidas, con el tiempo también se convertiría a nivel personal en uno de los grandes y los que le conocen bien saben de lo que hablo.



Mucho ánimo amigo y mucha fuerza, todos sabemos que te sobra!!...porque siempre has sido y serás uno de los grandes.

1 comentario:

  1. Muy bonito Ángel! que afortunadas son las personas que te conocen!


    Marc Fortuny

    ResponderEliminar